RETO MÓDULO 1

Hola de nuevo. Voy a comentar un hecho que, hace unos años, me llamó mucho la atención. 

Una clienta de la entidad financiera en la que trabajaba tenía un hijo y una hija con una diferencia de edad de apenas dos años. Comentando un día con ella sobre qué tal estaban los críos, me contó que en casa tenían un baúl lleno de juguetes de todo tipo, desde muñecas, a puzzles, pasando por cochecitos, peluches...y que, tanto ella como su marido habían intentado siempre educar a sus hijos de igual manera, sin imponerles el tipo de ropa o los juguetes con los que divertirse. Curiosamente, mientras los niños no fueron a la guardería, ambos elegían indistintamente, sin basar su elección en lo socialmente asignado como "adecuado" para un niño y para una niña. Sin embargo, cuando empezaron a interactuar de manera más profunda y regular con otros niños, empezaron a decantarse claramente por ciertos elementos. El niño por los cochecitos y muñecos que representaban figuras del género masculino, y la niña por elementos de color rosa y las muñecas. Antes el desconcierto de sus padres, les preguntaron a qué se debía ese cambio en su actitud y su respuesta fue que "les habían dicho que los niños no llevan falda ni tienen cosas de color rosa y las niñas juegan con muñecas".

Seguramente habrá casos diferentes, e incluso opuestos, pero de éste en concreto, la conclusión es, en mi opinión, clara. La asignación que la sociedad nos confiere en cuanto a nuestros gustos, roles, expectativas...lo que "se espera" de nosotros como hombres o mujeres no siempre se corresponde con lo que nosotros querríamos, ni con lo razonable incluso. En nuestra mano está que, poco a poco, esto vaya cambiando.